Presentado por primera vez por el legendario fabricante en 1993, este discreto tourbillon y reloj equipado con repetidor de minutos (sí, ambos) se produjo en las tres variantes de oro, y un año más tarde en platino. Dicho esto, se estima que la producción del 3939H ha sido inferior a 300 piezas en total, lo que hace de la rareza un factor importante en su ya considerable deseabilidad MAS.
34 mm de ancho, que es ciertamente pequeño para los gustos modernos, pero eso es parte del atractivo, en mi opinión. La huella más pequeña hace que esta inmensamente complicada obra de arte pase desapercibida en la muñeca, lo que no se puede decir de muchos tourbillones de repetición de minutos de una fabricación de primer nivel.
Si no tienes nada que demostrar a las masas, no necesariamente tienes que mostrar todas tus cartas y tener el capital para respaldarlas, me permito darte una de las mejores referencias para dejar la fábrica de Patek Philippe .
34 mm de ancho, que es ciertamente pequeño para los gustos modernos, pero eso es parte del atractivo, en mi opinión. La huella más pequeña hace que esta inmensamente complicada obra de arte pase desapercibida en la muñeca, lo que no se puede decir de muchos tourbillones de repetición de minutos de una fabricación de primer nivel.
Si no tienes nada que demostrar a las masas, no necesariamente tienes que mostrar todas tus cartas y tener el capital para respaldarlas, me permito darte una de las mejores referencias para dejar la fábrica de Patek Philippe .
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